FAMILIA DE DETECTIVE ENCONTRADO MUERTO EN VIÑA DENUNCIÓ AMENAZAS E INTERVENCIÓN EN SUS TELÉFONOS
El fallecido, según los peritajes, no tenía trazas de pólvora en sus manos.
Amenazas y hasta la intervención de sus teléfonos estarían sufriendo el abogado Patricio Olivares y su clienta Flaminga Olazo, madre del inspector de la Policía de Investigaciones, Francisco Gutiérrez Olazo, encontrado sin vida el pasado 23 de abril.
El caso fue informado en un comienzo como suicidio, tesis que ha sido cuestionada por la familia del joven funcionario.
Tan seguros están sus familiares de esto, que en mayo el abogado Olivares interpuso, a solicitud de Flaminga Olazo, una querella por obstrucción a la investigación, acción que posteriormente fue ampliada tras conocerse los resultados de peritajes que dieron cuenta, por ejemplo, de la inexistencia de trazas de pólvora en las manos de Francisco, situación que descartaría que haya manipulado un arma de fuego para quitarse la vida.
El 2 de septiembre, familiares y amigos realizaron una manifestación a las afueras del edificio de las Prefectura de la Policía de Investigaciones de Viña del Mar, acción pacífica que buscó visibilizar el caso de Francisco.
El objetivo se cumplió. El caso de Francisco se conoció en distintos medios de comunicación, incluso algunos nacionales.
Fue a partir de entonces que, según fuentes de este diario que pidieron no ser identificadas, comenzaron a suscitarse una seguidilla de hechos que han afectado tanto al abogado de la familia como a Flaminga Olazo, denunciante en este caso.
Seguimientos, amenazas verbales de personas que las han interceptado en la calle e intervenciones telefónicas, figuran entre las situaciones anómalas que estarían afectando al abogado y su clienta.
Consultados por estos hechos, el abogado Patricio Olivares declinó referirse a ellos, precisando, sin confirmar ni descartar estas denuncias, que se trata de una materia delicada que está en conocimiento del Ministerio Público.
Soychile